lunes, 28 de marzo de 2011
Asaltantes logran botín de 4 mil pesos
Port René Gutiérrez G./Fotos José Mario Aguillón G.
Reynosa, Tamaulipas.- Cuando uno de dos asaltantes armados con pistolas atracaban una negociación de compra de oro en la colonia Américo Villarreal, uno de ellos levantó su mano derecha y en un acto de desplante intimidario a una empleada de la negociación, hizo un disparo, pero con tan mala suerte que fue a incrustarse en un costado de su compinche, quien ahora se debate entre la vida y la muerte en el hospital General de esta ciudad, fue así como el destino se encargó de cancelar o por lo menos detener la carrera delictiva de este sinvergüenza,
La Policía Preventiva reaccionó al llamado telefónico de Alma Itzá Ruelas de 24 años, encargada del negocio de compra de oro “Reynosa” de la calle Gómez Lira de la colonia en mención, frente a las instalaciones de Comapa.
Los primeros oficiales en llegar del sector “Halcón”, reportaron a su central disparos durante el asalto, pero en realidad sólo fue uno y de calibre chico, que pudiera ser 22 o 25, según versión de la asustada empleada, que al momento de llegar la policía, no sabía que uno de los asaltantes había sido herido por su mismo compinche identificado al entrar al hospital con el nombre de Alejandro Ramírez Hernández, (a) El Negro.
Los delincuentes descritos como delgados y morenos escaparon en un auto marrón de marca no determinada, sin embargo, a los pocos minutos reportaban un joven herido de bala en una farmacia de la colonia Pedro José Méndez, colindante con la Américo Villarreal.
“El Negro” se percató del telefonema de la dependienta y salió corriendo y así, taponeándose la herida con su propia mano, cruzó la carretera a San Fernando y llegó a la clínica “Provida” de la avenida Margarita Maza de Juárez de la colonia Juárez 5.
Al entrar, El Negro se desplomó, de ahí, también llamaron a la policía y a la cruz roja, ya que como ese tipo de herida requería cirugía mayor y como el paciente no llevaba dinero con que responder la atención médica y hospitalización, paramédicos de la cruz roja lo subieron a una ambulancia y lo condujeron al hospital General, donde la policía preventiva y ministerial del estado, pudieron detenerlo y dar aviso al agente del ministerio público investigador.
La policía Municipal y la Ministerial desde ese momento lo tomaron en custodia, en el trayecto al nosocomio, donde fue identificado, dijo no tener domicilio en la ciudad. Que había llegando de General Bravo, Nuevo León a buscar suerte, pero por poco y pierde la vida al intentar estas emociones fuertes y según dijo, desconocidas para él.
“Tengo 18 años, dijo y la neta no soy malandrín, pero como conocí a El Flaco que vive en la Américo, le hice el paro para aventarnos ese tirito, cuando estábamos en la joyería la chava de ahí primero nos tiró al león, por eso el flaco hizo el disparo pero no se fijó que estaba a un lado y me dio el madrazo, la chava le dio dinero, y cosas como un celular, luego me dejó en la farmacia, él se fue y yo, busqué una clínica”, dijo, mientras era preparado para quirófano.
La afectada confirmó que fueron cuatro mil pesos, pertenencias de ella y su teléfono, hasta el momento el otro delincuente no ha sido detenido.
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