Por Manuel Rendón Hernández.
Reynosa,
Tamaulipas.-Profunda conmoción causó entre todos los miembros del Sindicato Único
de Trabajadores al Servicio del Estado de Tamaulipas el sensible fallecimiento
de la decana de los intendentes del edificio de justicia doña María Salud Ramos
Torres, acaecido este domingo en su domicilio al lado de sus seres queridos a
consecuencia de vieja enfermedad que la tenía postrada en cama desde hace poco
menos de un año, tiempo en el que el Gobierno del Estado le concedió la
incapacidad ordenada por los médicos que la atendieron en el I.S.S.T.E.
Doña Salud, como le llamaban cariñosamente
los servidores de las Agencias del Ministerio Público, Ministerial del Estado,
Unidad de Servicios Periciales del Estado y los mismos jefes departamentales,
en razón que desde que entró a trabajar en el área de intendencia de ese
edificio de gobierno hace unos veinte años aproximadamente, les marcó a sus
compañeros de intendencia la responsabilidad del trabajo encomendado, puesto
que acostumbraba llegar entre cuatro y cinco de la mañana a “sobarse el lomo”
como solía decir en algunas ocasiones.-
Al fallecer tenía 70 años de edad y siempre
se distinguió por su obediencia y puntualidad en sus diarios quehaceres.-
Por la mañana de este día –lunes- el
Delegado Regional de la Procuraduría General de Justicia del Estado Licenciado
Leonel Lozano Salinas presentó sus sentidas condolencias a los familiares de
Doña Salud a través de parte del personal de esa dependencia de la Procuraduría
y otorgó al personal administrativo el permiso necesario para que acudieran al
domicilio de la familia en donde lo estuvieron velando hasta tentativamente hoy
martes que sus restos sean inhumados en un panteón de la localidad.-
Todos los miembros del Sindicato Único de
Trabajadores al Servicio del Estado de Tamaulipas no pudieron ocultar el dolor
de perder a una compañera y amiga tan sincera como lo fue Doña Salud y fue por
ello que estuvieron formando guardias en el féretro que depositaba sus restos
mortales.- Que Dios Nuestro Señor reciba en su santísima Gloria a esta buena
mujer.-
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