Reynosa, Tamps.-
Un grupo de cinco delincuentes tentativamente drogados por lo torpe de su
actuación al irrumpir en el humilde domicilio conformado por el modesto taquero
Agustín Santes López y su esposa Cecilia Hernández Ramírez y su pequeña hija de
apenas cinco años de edad, cuando como a la una de la madrugada sus moradores
despertaron al sentir el fuerte ruido de la puerta del lado de la cocina cuando
fue abierta de una patada, pero cuando trataron de reaccionar los sujetos se
abalanzaron a golpes contra el jefe de la casa y de su esposa, inutilizando al
hombre al colocarle un pañuelo sobre su cabeza para cubrirle los ojos y otro le
ató sus manos por la espalda.
Sobre el particular el señor Santes López al
presentar su formal denuncia hoy al medio dìa en la Agencia Séptima del
Ministerio Pùblico Investigadora a cargo del Licenciado Jesús Treviño Vega, relató
la terrible odisea que pasaron en su casa ubicada en la calle Juan Escutia
número l03 de la colonia Lucio Blanco, describiendo que estaban dormidos en su
casa de madera de una sola pieza que mide cuatro por seis metros, mientras
terminan de construir una casa de material en el mismo solar, la cual se encuentra
inconclusa por la falta de dinero, pero es el caso que los cinco maleantes que
deben de ser vecinos de esa colonia no se dejaron ver sus rostros y mientras a él le exigían con palabras impublicables les
entregara todo el dinero que tuviera, su esposa les gritaba desde un rincón del
cuarto que todo el dinero lo tenía en su cartera la cual se encontraba sobre el
modesto buró conteniendo cuando mucho unos ochocientos pesos, pero escuchó que
de manera burlona el que la hacía de jefe les ordenaba a los otros que se
llevaran lo que fuera y hasta la llave de su camioneta marca Nissàn tipo pick
up, modelo l996 de color azul se la llevaron también.-
Expresó el denunciante que una vez que los
delincuentes se retiraron su esposa le desató las manos y retiró la improvisada
venda que le cubrìan los ojos y fue cuando se enteró que los hamponcetes se
llevaron el microondas, una plancha, su celular, un modular, una bicicleta y
unos anillos por valor de unos 8 mil pesos.-
Consideró el denunciante que los delincuentes
de referencia son drogadictos de los alrededores en razón que al parecer llegaron
a piè, porque su esposa observó que todos se fueron en su camioneta,
solicitando que se les haga justicia y capturen a los responsables para quienes
pide severo castigo en su momento.-
Una vez que firmó su denuncia, el titular de
la Agencia Séptima Investigadora ordenó se enviara oficio al Comandante de la Policía
Ministerial del Estado a efecto de que ordenara a los Jefes de Grupo que
corresponda la investigación de estos hechos, habiendo trascendido por parte de
algunos ministeriales del Grupo de Robos, que tienen conocimiento que ese mismo
grupo delictivo, recientemente penetraron con el mismo sistema en una modesta
tienda de abarrotes y al igual, cargaron con lo que pudieron y se alejaron a
bordo de un taxi que casualmente pasaba por el lugar.-
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